viernes, 9 de diciembre de 2016

De fracasos sin grandeza

Hay algo extravagantemente hipnótico en un fracaso tan absoluto como el que representa Jack Reacher, película que un tal McQuarrie, algo así como un guionista de cámara de ese peculiar actor que es Tom Cruise, ha pergeñado a medida de la estrella, que se ve que ha intervenido hasta tal punto en el proyecto que resulta embarazoso de contemplar en pantalla la infantilizada proyección de como le gustaría que el público le viera.

No tengo ni idea de como es el personaje en las tropecientas novelas que Lee Child ha escrito con él de protagonista (y que para mi sorpresa he descubierto que están publicadas en español), pero en el film Jack Reacher es un frankenstein en el que se juntan pedazos de personajes clásicos (Sherlock Holmes, sobre todo) con todos los residuos de la mitología (en el sentido barthesiano) de la cultura popular norteamericana, el cowboy solitario, el justiciero nómada, el (coñazo del) loser, Rambo, Bourne, el propio papel que interpreta Cruise en esa franquicia en eterna decadencia que es Misión imposible... La suma de todo eso es una muestra de la absoluta impotencia del cine norteamericano contemporáneo para crear un personaje, quiero decir un personaje de talla mítica, un Ethan Edwards, para entendernos. El único que queda es Clint Eastwood, al que ya la crítica europea empieza a darle la espalda por dedicarse a hacer obras maestras tan antipáticas como El francotirador, película que desde aquí aconsejamos fervientemente a McQ y a Cruise que se abstengan de ver si no quieren verse abocados a una depresión insuperable.

3 comentarios:

Luis S. dijo...

Tanto como obra maestra no diría yo que es "El francotirador", pero sí una película de una amargura y complejidad que no están al alcance de muchos. Sergio Sánchez tiene un buen texto sobre el asunto.
Luis S.
El cine en que vivimos

abbascontadas dijo...

probablemente tengas razón, aunque a mí me parece de las mejores películas norteamericanas de los últimos años. También es cierto que la entrada la he escrito con Jack Reacher reciente, y eso agiganta el recuerdo de la de Eastwood enormemente (también está el hecho de que fue recibida por estos lares con mucha suspicacia)

Sergio Sánchez dijo...

Conste que la puse extraordinariamente bien aunque esté de acuerdo con el apunte que me hizo Luis, que tampoco hay que pasarse con Eastwood y definirlo casi como un cineasta pijoprogre es un exceso.