domingo, 27 de mayo de 2012

Camille redouble



Parece ser que la programación de las películas francesas en Cannes es objeto de sesudos análisis que recuerdan a los politólogos que se entretienen desentrañando los signos que emiten sistemas herméticos y totalitarios como la URSS en sus épocas de esplendor o la China de nuestros días. Para un espectador español que no tiene intereses en juego y al que las jerarquías entre secciones le dejan un poco indiferente, lo que percibe este año es un poderío y un abanico de registros pasmoso, y que se nota más por lo floja que ha sido la participación de la otra cinematografía que parte el bacalao, la norteamericana.

Ayer me vi Camille redouble, una comedia de Noemi Lvovsky que han premiado en la Quincena de realizadores, y que es un remake de Peggy Sue got married que le sirve a la actriz/realizadora francesa para quitarse años de distintas maneras, para revisitar su adolescencia y para homenajear a su madre. Hay una cita en clave paródica del film de Coppola muy divertida, y le da la vuelta a la famosa escena del planetario de Rebelde sin causa. Es divertida y agradable, tiene secuencias estupendas de diferentes tonos, y muestra que no sólo de cine de autor y de comedias populistas vive el cine francés, que también sobrevive la clase media. 

No hay comentarios: