lunes, 6 de agosto de 2012

La fascinación de los falos corredores



Hasta ayer noche, en que mi hija me sentó delante de la tele a ver la final de los 100 metros lisos, no había visto nada de los Juegos Olímpicos, esa competición hipertrofiada que el obscenamente megalómano ex-alcalde de Madrid y actual Ministro de(mente) Justicia se empeñó en traerse a Madrid (infructuosamente, gracias a dios y a las corruptelas de los comités olímpicos). Los JJOO deben de estar llenos de deportes chorras, porque si no no se entiende que den tantísimas medallas, pero la verdad es que lo que mola son las carreras, sobre todo las de velocidad, esas que corren unos negrazos con un carisma sexual axfisiante, lo que no debe de ser ajeno a la fascinación que estas pruebas extraordinariamente primitivas ejercen en nosotros, los espectadores. Porque esto de ver quién llega antes es un juego que, como todos los padres saben, los niños abandonan por aburrido a los cuatro años de edad, que es cuando empiezan a intriducir reglas progresivamente complejas, hasta llegar a esos entramados tan enrevesados en que hay equipos, pruebas, rehenes, posibilidades de rescate y habituales peleas porque se originan conflictivas discusiones por diversas interpretaciones de la ley.



4 comentarios:

´´ dijo...

Lo de los cien metros es una estupidez, es imposible saber si un tío corre a 9 '50 o a 10'50 viéndolo por la tele, la gracia llega cuando te dicen la marca, pero en realidad es lo mismo una carrera mala que una buena.
Lo que mola son los 1500 que hay táctica.

abbascontadas dijo...

Sí, las carreras de media distancia son estupendas, hasta las de 10.000 mtros, en que dan tropecientas vueltas sin que pase nada. Las de velocidad duran tan poco que luego las teles le dedican un montón de tienpo a cada zancada y a cada segundo.

Qualunque dijo...

Lo de los juegos es alucinante, en especial esos deportes que nadie ha visto en su vida y que casi nadie entiende ni lo más básico de sus reglas aunque lo vea como si fuera la final de la Copa de Europa de futbol.

Teniáis que haber visto a mi hermano siguiendo un combate(se dice así?) de judo y preguntándome qué coño era eso de un ¨Ippon¨, yo pensé en contestarle que una especie de teléfono móvil, pero el chiste me pareció lamentable...

abbascontadas dijo...

Hoy en la comida me he encontrado con que la mitad de mis compañeros se vieron la final de... Taekwondo! Y estaban deslumbrados. Ningunto tiene ni idea de taekwondo ni de nada que se le parezca, por supuesto.
La verdad es que si te pones a verlas, como son competiciones constantes, te quedas enganchado.