miércoles, 5 de diciembre de 2012

La Ley y la doncella



No había visto ninguna película dirigida por Ida Lupino hasta que la Filmo programó un ciclo el mes pasado, del que quedó excluida su, al parecer, vastísima obra para televisión (según cuenta el IMDB). Sólo me pude acercar a ver Hard, fast and beatiful, que me pareció buenísima, y que me ha abierto el apetito para ver el resto de su filmografía, y la última película que dirigió para el cine, The trouble with angels, dirigida cuando ya llevaba más de una década dedicada a la realización de series para la tele (este dato también lo saco del IMDB), y que en España está accesible gracias a la heterodoxa y desmelenada colección que Karma dedica al cine religioso, o espiritual, o como lo llamen.

The trouble with angels es un film que puede considerarse extremadamente provocador, dado que transcurre en un convento católico dedicado a la educación de adolescentes donde no hay monjas lesbianas ni psicópatas, y extremadamente ortodoxo, puesto que vuelve a narrar el desconcertante hecho de que la Ley no sobrevive allí donde no hay transgresión, y que es precisamente el rebelde el llamado a perpetuarla, pues es el único que en su desafío alcanza a percibir su grandeza. Así, ni la Madre superiora ni la película muestran mayor atención por el grupo de jovencitas pijas que son enviadas al internado para recibir una educación esmerada que las sitúe bien en el mercado conyugal de clase alta, y se centran en Mary, la irreductible gamberra que, por otro lado, parece la única que se siente verdaderamente interesada por lo que oculta/revela el rito respecto a lo sagrado.

2 comentarios:

Sergio Sánchez dijo...

Yo he visto "The bigamist", que está francamente bien, aunque el punto de vista no me pareció especialmente avanzado a su tiempo, y sí muy condescendiente con un personaje masculino muy poco interesante y muy duro con un personaje femenino lleno de cualidades. A veces lo de no juzgar no me parece una virtud.

abbascontadas dijo...

He visto que está en Filmin, a ver si me la puedo ver estos días, aprovechando que mis hijos han tenido la buena idea de irse a Holenda en el puente y me dejan la tele libre.