miércoles, 28 de octubre de 2009

Lo que la ola se llevó


El mismo día que me vi Casque d'or en la filmo me puse Adieu, philippine en casa, que no está mal, pero que queda lejos de la película de Becker. Esto me hizo recordar la tonelada de artículos y reportajes que estos meses nos han caído sobre la nouvelle vague, en muchos casos escritos por gente a la que le suena de algo el nombre de Truffaut, que según recuerdo es el que más arremetió contra sus mayores cinematográficos. Por ignotas razones (en las que la pereza ha debido de influir mucho) sus palabras se consideraron una especie de revelación divina, y no el obvio quítate tú que me pongo yo de toda la vida.


El caso es que no estaría mal hacer alguna referencia a lo que la nouvelle vague borró del mapa, como una concepción meticulosa de la puesta en escena, una profesionalidad en todos los oficios y unos guiones bastante trabajados, factores todos ellos que se denigraron con el concepto de qualité, y que hoy es lo que nos alegra la vista (y el oído), ya que ese gusto por lo bien hecho se echa en falta hasta en producciones solventes contemporáneas. Y esto no es sólo en el cine de Becker (o Renoir); da gusto reencontrarse con Carné o Duvivier, y hasta se puede apreciar sin problemas un Clouzot, como me pasó hace poco con Las diabólicas, que sin ser nada del otro jueves me pareció mejor que casi todos los Truffaut que he revisitado recientemente, y que en general me han aburrido un poco.

2 comentarios:

Jesús Cortés dijo...

Me parece maravillosa "Adieu Philipine" pero tienes razón, es mejor "Casque d´or". Es la obra cumbre de Becker y quizá una de las cinco mejores películas francesas de todos los tiempos, aunque que se está olvidando por pura pereza.
Creo que si "Casque d´or" fuese de Renoir, aparecería en más listas y sería más recordada

abbascontadas dijo...

Ja,ja; seguro que tienes 25 títulos para la lista de las cinco mejores películas francesas de todos los tiempos.
La verdad es que la sala de la filmo estaba a reventar con público de todas las edades, y se notó "físicamente" como la película subyugó a la platea al completo.
En realidad la entrada del blog es una especie de "mea culpa" porque estaba convencido de que había visto la peli y resultó que no, o sea que para mí fue todo un descubrimiento.