Leyendo a Cunqueiro en los preciosísimos volúmenes de la Biblioteca Castro. He aquí un par de breves apuntes de poética espigados de Merlín y familia.
Te digo que por mucho que saques de ti una historia, siempre pones cuatro o cinco hilos de verdad, que quizá sin darte cuenta llevas en la memoria.
Claro que las [historias] las decoro un poco, saco las señas de la gente, pongo que estaba presente un tal que era un cojo, o que casara de segundas con una mujer sorda que tenía capital, o que tenía un pleito por unas aguas, o cualquier otra nota. Las historias, como las mujeres y los guisados, precisan de adobo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario