jueves, 11 de marzo de 2010

Come september


Tengo una imagen desdibujada de Robert Mulligan, del que la Filmoteca presenta un ciclo este mes. Del listado de sus películas apenas conozco media docena, y sólo estoy seguro de haber visto las más conocidas (Matar un ruiseñor y El otro) en algún pase televisivo de mi adolescencia, pases de los que guardo, por otro lado, un buen recuerdo, lo que sin embargo no me ha llevado a mostrar curiosidad por el resto de su filmografía.
Ayer ponían Come september, y una serie de azares me llevó a acercarme a verla, entre otras cosas el descubrir que era una película de la que había visto algún plano de refilón también en la tele, una comedia con Rock Hudson de la que me imaginé un tono ñoño. Pero recordaba que era en scope, en color, y transcurría en Italia, así que en pantalla grande muy mal se tenía que dar para no pasar un rato agradable (copia en muy buenas condiciones, por cierto).

Bueno, hacía tiempo que no me reía tanto viendo una comedia. El folleto que dan para introducir el ciclo, de un crítico de Positif, ni siquiera la cita, y despacha el grueso de películas que hizo Mulligan alrededor del 60 para la United Artists como carentes "de personalidad", y no debe de ser mucho el prestigio del film porque la sala estaba bastante vacía (con lo que mis continuas carcajadas se debían de oír bastante).
Come september tiene un comienzo en estado de gracia que debería ser obligatorio en cualquier escuela de cine, en el que se plantean magistralmente los temas que se desplegarán en el desarrollo del film. El equívoco que dispara el conflicto es muy divertido (un millonario estadounidense adelanta inesperadamente su visita anual a su villa italiana para visitar a su amante, y descubre que el servicio a cargo de la casa la regenta como hotel en su ausencia) y el film se cierra con uno de los gags más hermosos que recuerdo (y que no voy a desvelar aquí, por su alguien se anima a verla).


Imagino que una de las razones por las que este film vegeta en el purgatorio de las obras olvidadas es porque su estructura clásica, basada en la prolongada dilación del encuentro sexual de los protagonistas (el camino por el que la pulsión se transforma en deseo) hasta que éste encuentra un cauce simbólico para desarrollarse (en una de las peticiones de matrimonio más divertidas de la historia del cine) tenía pocas posibilidades de encontrar gracia a los ojos de la crítica de las últimas décadas del siglo XX, más bien fascinados por el estallido de la pulsión en todas sus vertientes.
Vista 50 años después, uno puede hacer recuento de lo que el cine ha perdido por el camino, como cierto ojo casi automático para la elegancia en la puesta en escena (por ejemplo, un plano al comienzo en el que la cámara sigue al rolls del protagonista atravesando un pueblo italiano y acaba quedándose con el dueño de una taberna que llama corriendo al hotel/villa para avisar de la que se avecina, de una compleja -en la preparación- sencillez -en la ejecución- que es fácil que pase inadvertida), o un oficio en la escritura que da lugar a personajes antológicos (como Maurice, el mayordomo leal y estafador a la vez), a desternillantes secuencias (esa en el que una ingenua y envarada estudiante de psicología descubre involuntariamente al protagonista el engaño del que es objeto por parte de los criados) y a frases antológicas ("¿Por qué ser desgraciada con un hombre al que no quieres pudiendo ser desgraciada con el hombre al que quieres?").


Rock Hudson está simpático como actor de comedia, aunque no acaba de resultar del todo convincente la pasión que ejerce sobre una descomunal Gina Lollobrigida que se lo come en pantalla (a él y al resto del elenco, con excepción del magistral Walter Slezack, el bribón y maquiavélico y encantador mayordomo), guapísima e impresionante con el vestuario que se gasta. Los chavales que dan la réplica a la pareja estelar funcionan algo peor y su parte es más floja, pero bueno, así es la vida, ya crecerán y aprenderán de sus mayores.

5 comentarios:

Sire dijo...

Come September quizas tendria que revisarla; me gusta mucho Mulligan, por muy irregular que resulte una peli suya, siempre tiene detalles muy interesanes y a destacar. Quizas mi favorita suya "Amores con un extraño", que creo que ni está editada en dvd :-(

abbascontadas dijo...

Amores con en extraño me espera el domingo en la filmo, anímate a hacerme una lista de must de Mulligan, porque ando perdido.
Come september es divertidísima, sobre todo si eres un padre de familia con hijas adolescentes, imagino que también puede resultar conservadora o resultar absurda.
Siguiendo tus indicaciones me estoy peparando un finde Hathaway.

Sire dijo...

anda Hathaway, bieeeen, ¿cuales piensas ver???

de Mulligan tenia yo por ahi una entrada en el blog del año pasado, creo, sobre "Inside Daisy Clover", una peli que no está muy bien considerada, pero a mi me fascinó y donde ademas se notaba la mano del productor Alan Pakula, no sé si la habrás visto...

abbascontadas dijo...

Tengo por aquí El correo del infierno y Valor de ley.

Me he leído la entrada sobre Daisy Clover y una entrevista que tenías de Ophuls, que me he pasado la tarde recomendando Carta de una desconicida a mis compañeras de despacho.

Sire dijo...

jeje,Ophuls es de mis directores favoritos y acabo de revisar Caught (Atrapados), pelicula de la quiero comentar en el blog pero como siempre me pasa con mis directores más favoritossss, me desbordan y nunca consigo escribir nada sobre ellos :-((, a ver si no pasa de este finde.