Mientras dejo grabando la alfombra roja (que aquí son escaleras, como todo el mundo sabe) de Almodóvar y así ser el primero en saber qué vestido lleva Penélope (que es portada de un sin fin de revistas hoy) cuento que Abrazos rotos ha tenido, al parecer, muy buena acogida en el pase de prensa, que luego Almodóvar ha tenido un encuentro con la prensa española donde se ha producido un incómodo silencio cuando ha entrado el inefable Boyero (esto lo cuento de oídas porque yo estaba en ese momento intentando arrancarle una subordinada a Von Triers, tarea épica en la quem como cualquier héroe moderno, he fracasado) y que me han estado confirmando los rumores que corrían de que Almodóvar se ha movido entre bambalinas para, al menos, sacar Ágora de la sección oficial, y alejarla lo más posible de su proyección y descafeinar su presencia.
Y antes de darle al play rec para tener la alfombra más esperada he estado entrevistando a Cantona, que ha hablado tan bajito de su participación en la película que no le he entendido nada, salvo que esto es un proyecto suyo, como han confirmado luego Paul Laverty y Ken Loach, que pensaban que era una broma cuando recibieron la llamada inicial.
Laverty es muy simpático y, como marido de Icíar Bollaín, entiende perfectamente el español (aunque no lo habla tan bien), y ha contado con mucha gracia el proyecto; Ken Loach no parece especialmente interesado en estos encuentros con la prensa, así que lo único curioso que puedo contar es que reconoce que prefiere un partido de fútbol de calidad media q su homólogo cinematográfico, aunque prefiere una gran película a un gran partido. Como ya Cantona contó que el Manchester va a ganar la Champion no lo he vuelto a preguntar, aunque también vivió tres años en Barcelona (igual jugó en el Barça y no me he enterado).
Y por los pelos me he metido a ver Independencia, una película del filipino (o la filipina) Raya Martin; y digo por los pelos porque hemos llegado tardísimo al envío del telediario porque se ha ido la luz en todo el barrio del apartamento donde estamos porque hay huelga de algo y todo es siempre así de trabajoso. Y de Independencia no puedo decir mucho porque no he entrado en la propuesta, que debe de ser una especie de film histórico de cámara de un extraño hermetismo naif. Una propuesta curiosa e inaccesible.
4 comentarios:
Penélope ha estado guapísima todo el tiempo, paseando por Cannes y en la alfombra roja. Aunque no termino de entender esta pasión de los franceses por Almodóvar... en este sentido me posiciono junto a Boyero (si, lo he vuelto a hacer, he visto el videoblog de El Pais), donde dice que no ha vuelto a ver la peli ahora, que no estaba dispuesto a pasar otra vez por esas dos horas de tortura. Así que no me extraña que se hiciera un incómodo silencio en la sala de prensa en el encuentro con la prensa española. Maria José, gran defensora de ver las películas españolas para poder comentarlas (no como yo, que directamente las critico tras ver el título o el trailer) y gran defensora de estar a la última para poder opinar, fué a ver Los abrazos rotos al poco de su estreno. Le pregunté que qué tal y me dijo con una gran sonrisa "bien, muy bien, bueno, ya sabes, una bazofia, o sea, más de Almodóvar". Estoy deseando verla. Dudo entre conseguir una copia pirata por internet (es muy tentador en estos tiempos que corren aunque no sé si se hundirá la industria por eso) o esperar a que la estrenen en canal plus o que la pasen en Versión Española. Por otro lado, de todos es conocido lo celoso que es Almodóvar con los directores jóvenes que le pueden hacer sombra (tengo un puñado de anécdotas al respecto y eso que mi relación con él siempre ha sido de refilón), por lo que no me sorprende nada que en un escenario como Cannes se haya sentido como el príncipe destronado con la presencia previa de Amenábar.
Lo que cuentas de la peli de Ken Loach me gusta mucho. Espero que la estrenen pronto, ¡esta si que dan ganas de verla!
Abbascontadas! pero al final de qué color el vestido de Pe?
El gesto de Almodovar entre bambalinas me parece bastante feo, aunque sea un rumor...alguien podría haberle preguntado al respcto en el incómodo silencio tras la entrada de Boyero en sala de prensa.
Y este párrafo anterior se lo dedico además a Larsvon para que sea más generoso con sus subordinadas.
Abrazos de titanio
Hombre, ya tardaís en dedicar un pst donde relatar ese puñado de anécdotas de Almodóvar respecto a los directores jóvenes. Aunque sólo sean rumores, sería interesante leerlas, ya que sí está probada la capacidad conspiratoria del manchego. Venga, sed generosos con el morbo.
Felicidades por el trabajo en Cannes y por mantener este blog. Saludos
Julien
Bueno, lo primero que tengo que decir es que, salvo las pelis, claro, el festival se sigue mejor en Madrid que aquí; de hecho siempre nos llaman del telediario para preguntarnos por noticias de las que no tenemos ni idea.
Por lo que me han contado, Almodóvar sacó Ágora de la sección oficial, y en el campo enemigo (el de Amenábar) se sospecha que presionó para que entrara la Coixet (que en su peli consigue que haya un feeling sexual entre los protagonistas similar a de dos lenguados en horas bajas) y así echar (por razones de cuotas, sólo franceses y americanos meten más de dos pelis en la sección a competición).
Anoche comentaban en la cena que Gilles Jacob (muy amigo de Almodóvar) había comentado que el manchego elige el día de proyección y el premio que se lleva.
Hay que decir que Almodóvar fue recibido apoteósicamente en las escaleras, y Penélope también, que iba de princesa de cuento de hadas, que con la alfombra no se juega.
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